Este pajarillo del tamaño de un gorrión hace acto de presencia en nuestras tierras de marzo a mayo, permaneciendo con nosotros hasta la siguiente migración, en septiembre-octubre, cuando deciden si marcharse con sus compañeras o quedarse a pasar el invierno aquí.
Estamos a mediados de abril, hemos venido a valorar el terreno. Vaya vistas tenemos desde aquí, se ve hasta el mar!!!
Prefieren invernar en zonas africanas, parece que les gusta mucho el calorcito, pero para la época de reproducción eligen zonas menos intensas, como los verdes prados de Arraiz.
Echando un vistazo en busca de un buen hueco para montarme el chalé…
Hacía un par de años que no se veían y nos sorprendió esta pareja de la especie. Las hembras son más moderadas en su traje nupcial, diferenciándose sobre todo por la raya del ojo…
Parece que no hay nadie por aquí, no hay vecinos molestos. Un petirrojo en ese roble y un par de colirrojos sobre las matas…
..que en los machos llega marcadamente hasta la zona auricular, como un antifaz. Ya que estamos en época de buscar pareja, se ponen sus mejores galas: el pecho de un tono ocre intenso, la espalda pardo-grisácea, las gafas de sol…
Pero qué dices, si a mí me escoge el traje mi novia…
…listos para la conquista.
Aquí se aprecia mi pequeño moñete grisAquí mis zapatos de gamuza azulMi mejor perfil, only for your eyes…
La collalba gris es monógama, lo que significa que tienen la misma pareja toda la vida. Bueno, no todos, siempre hay alguna excepción.
Y yo fui a escoger al más presumido de todos…
Buscan agujeritos entre piedras y construyen un nido con musgos y hojas…
En ello estoy, mientras mi chico distrae a los pajareros…
…como parecían hacer estos dos cerca de las ruinas en lo alto del monte…
En días luminosos, cuando el sol baja la guardia y emite sus últimos rayos oblicuos, como enfocando el resto del día, y nos resistimos a dejar la tarea fotográfica, es sorprendente el efecto dorado que se refleja en las fotos.
En esta imagen de nuestro carbonero común, era un día de aire glacial en invierno.
Hoy hace un poco de fresquito y me he puesto el plumífero
Nuestros pajarillos se revisten de un halo mágico, convirtiéndose en los protagonistas de cuentos y leyendas. Es el caso de esta collalba gris, que parecía disfrutar de un baño de sol tardío, allá en el mes de septiembre.
Entre rayito y rayito, voy al suelo de un saltito, cojo un rico gusanito y me vuelvo a mi puestito
Las ramas sobre las que se aposentan adquieren tonalidades rojizas, en su juego de luces y sombras, y nuestro reyezuelo listado buscó cobijo como pudo en la desnudez del otoño.
Sssssss, que estamos jugando al escondite, no digas nada!
Todo elemento, desde una simple ramita al más alto arbolito, emite mayor sensación de calidez.
En este caso, este mosquitero musical de aire bonachón decidió que las viñas ya secas eran un buen refugio. Hasta que se acabaron las uvas…
Todo el verano comiendo mosquitos gorditos y ahora se me ponen a régimen, ainssss
Este gorrioncillo con aire adormilado escogió uno de los pocos arbustos que permanecen con hoja todo el año. Han constituido una numerosa comunidad cerca de los establecimientos hosteleros en el alto de Arraiz, siempre cerca de la especie humana…
Avísame a la hora de la cena, que voy a echarme una cabezadita…
El elegante pinzón de mirada inquisitiva, disfrutando del tibio calorcillo de esta hora del día, a finales de junio, ya entrado el verano.
Me estoy tomando un leve descanso. He quedado con mis amigos para limpiar la viña, y es un trabajo muy duro…
y el mosquitero común, más atento a los mosquitos que pululan al atardecer, base de su alimentación. Y en estos días de primavera había muuuuchos…
Hoy toca mosquitos al vuelo, los más ricos, mmmmm
Sin olvidarnos nunca de nuestro compañero habitual en cualquier horario,temporada, amanecer,mediodía o atardecer, haga frío viento lluvia o sol. Porque de noche lo de sacar fotos se nos pone un poquito difícil, que si no…sería el protagonista absoluto: el siempre presente petirrojo. Ayer mismo. En el arbolito junto a la casa. Cualquier día se viene a vivir con nosotros.
Ah! Y que nos despierta cada amanecer. Como siempre, un placer, gracias por venir!
A tu disposición! Siempre que quieras sacar fotos, me pido primer!