Acicalamiento de un joven cormorán

En el humedal de Bolue, mientras los pajareros esperan la fugaz aparición del siempre presente pero esquivo martín pescador, se divisa un lejano punto en el cielo. El oscuro punto se acerca, se agranda…y se introduce en el agua mansa resurgiendo en forma de joven cormorán.

Aterrizaje perfecto! O es amerizaje? Y cuando el agua pertenece a un humedal…será humedalizaje???

Bucea con un nítido chapoteo, alborotando a la nívea garza, las cuatro gallinetas y la media docena de ánades azulones que se alimentan por la zona. Tras un par de largos bajo el agua, emerge y vuela hasta el tronco más cercano, que resulta ser el que mejor nos pilla para fotografiarle…

¡Listo! Ya me he quitado el polvillo del viaje,
Sacudida pa’ un lao…
Sacudida p’al otro…
…erretorcimiento escurridor de cuello…

Precioso espectáculo representación del ciclo corto de lavado (ni cinco minutos ha tardado).

Tachánnnnn! centrifugado terminado. Procedamos con el acicalamiento!

Y ahora es cuando comienza el ballet, sólo falta la música de orquesta de fondo.

…en mi cabeza suenan las primeras notas, voy preparándome para la actuación…

En ese momento el rumor del agua y las hojas de los árboles al compás del viento generan una perfecta sinfonía, que nos hace recordar la famosa danza…

…Nada que envidiar al esbelto cisne…
…delicadas y perfectas son mis plumas…
…para muestra, un botón, digooo, un plumón…

Y nos quedamos con la sensación de haber recibido un digno regalo. La naturaleza y el arte en un mismo espacio. Gracias, joven cormorán.

Este espectáculo ha sido gratis! En el próximo paso la boina, eh!

Acercaos al humedal de Bolue. ¡Nunca se sabe cuándo puede ser la próxima representación!

VUELVEPIEDRAS, en verano

Esta curiosa limícola nos llama la atención: su trabajo habitual consiste en, ni más ni menos, levantar piedras. Sí, ahí donde la ves, la levantadora de peso más hábil del mundo mundial es una pequeña avecilla habitualmente costera, aunque últimamente, ya sea por las calores habituales o por afán de turismo, está siendo vista por el interior en lugares como Salburua.

Puedes verme en costas, desembocaduras de ríos, humedales…
Yo estoy disfrutando de las vistas rocosas en la playa de Noja

Esta chiquitaja que gusta de revolver en limos y fangos se distingue por sus patas naranjas, plumaje de varios colores y un pico corto con el que hace palanca para dejar al descubierto la comida.

Y obtener sabrosas piezas como este cangrejillo…

Existe una diferencia clara en época de cría: los machos se disfrazan con una hermosa careta blanquinegra, dorso anaranjado y negras líneas de curioso dibujo…

¿Careta dices? ¿Y lo que me cuesta pintarme esto todos los días?

…mientras que las hembras también cambian sus colores pero de manera menos llamativa, con rayas negras en la cara y en general tonos más apagados.

Ya sabéis que en la Naturaleza son ellos los que se ponen guapos. Que si no, no pillan novia…
…aunque nosotras, a poco que nos pintemos la raya del ojo, quedamos así de chulas.

Los ejemplares que no están en edad de buscar pareja no tienen color naranja pero sí ciertas líneas negruzcas en la cara, pareciéndose más a los juveniles…

Osea, ¿Me estás diciendo que tengo cara de niño?

…pero con el color terroso más oscuro.

Y disimulado, que me sirve perfectamente para parecer un trozo de roca…

Uno de sus lugares preferidos para la búsqueda de alimento es la costa tras una buena tormenta. Allí disfrutan rebuscando entre palitos, restos de maderas, piedrillas y algas variadas.

Entre los restos viajan multitud de animalillos pequeños pero muy nutritivos…
Y aquí hay uno bien agarradito a esta piedra…

Como son aves viajeras podemos verlas en grandes grupos durante los pasos migratorios, en mayo cuando viajan a los países más fríos de Europa para su reproducción y en septiembre cuando vuelven con los polluelos.

Nos estábamos planteando el viaje y hemos pensado…¿Pa´qué?

Pero hay unos cuantos que deciden tener a sus vástagos aquí, será debido al clima o a que se sienten bien acogidos…

Euskadi nos parece un lugar perfecto para dar nuestros primeros pasos…

Y así es como hemos podido observar a las nuevas generaciones de vuelvepiedras…

Arena fina, mar en calma, gente estupenda…

…en zonas costeras, como Algorta, embarcaderos como en Portugalete y sobre todo, en las rocas de la playa de la Bola, donde se reúnen con chorlitejos y garzas.

…y pintxitos ricos, ricos!

Sed siempre bienvenidos, nos encanta veros!!!